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Luis Arráez es un bateador élite de las Grandes Ligas. Mantenerse entre los mejores toleteros del beisbol más exigente del mundo es una costumbre para el oriundo de San Felipe, estado Yaracuy. Ahora con los Padres de San Diego tendrá que trabajar arduamente para mantener su presencia en varios récords ofensivos.
"La Regadera" fue cambiado recientemente a los Frailes, proveniente de Marlins de Miami. A cambio de él, los peces recibieron a cuatro peloteros. Los dirigidos por Mike Shildt ganan a un hombre con muchísimo contacto y habilidad para poner la pelota en juego, lo que incrementará la producción de carreras.
Luis Arráez, un hombre que lidera estadísticas impensadas
Es totalmente cierto que Arráez batea en cualquier equipo, estadio, condición, sin importar el rival ni la hora en la que se juega el cotejo. Pero con su inmenso talento ha implantado una fantástica cifra desde que se estrenó en la Gran Carpa.
Su debut fue en el 2019 con la franquicia de los Mellizos de Minnesota. En ese año dejó registro de 109 incogibles, 4 cuadrangulares, 28 carreras remolcadas, 54 anotadas, 36 boletos negociados y 29 ponches sufridos en 326 visitas al cajón de los bateadores.
Desde que se estrenó en las Grandes Ligas, no existe un pelotero que se acerque al promedio ofensivo que ostenta Luis Arráez jugando en casa. Su AVG en esa situación es de .335. Su perseguidor más cercano es Xander Bogaerts, con .308. Estamos hablando de 27 puntos porcentuales de diferencia, lo que equivale a varios compromisos con buen rendimiento.
En el máximo nivel del beisbol profesional puede resultar mejor para los peloteros jugar con la afición a su favor. Es cierto que la presión en Estados Unidos, quizás, no se compare a la que se vive en las tribunas de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), pero continúa como un factor clave a la hora de medir el rendimiento de un jugador.