El atasco de Semana Santa es un fenómeno inesperado que está afectando a los conductores durante el período de retorno de las vacaciones. Aunque los atascos son comunes en esta época del año, algunos automovilistas están experimentando dificultades adicionales, especialmente aquellos que conducen coches eléctricos.
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Los propietarios de vehículos Tesla se han visto particularmente afectados. En las estaciones de supercargadores de Tesla, se han formado largas colas, lo que ha prolongado el tiempo necesario para recargar la energía de sus coches eléctricos. Estas colas han sido especialmente notables en la estación de Tesla ubicada en la A-31, cerca de La Gineta en Albacete, donde la marca ofrece ocho puntos de carga de hasta 150 kW de potencia. Algunos conductores incluso han tenido que buscar rutas alternativas para evitar la espera.
Además de los atascos, otro problema en la infraestructura de recarga es la potencia limitada de algunos cargadores de coches eléctricos. Cuando varios vehículos se enchufan al mismo tiempo, la velocidad de recarga se reduce. Por ejemplo, en la estación de Tesla en Atalaya del Cañavate, los conductores han experimentado tiempos de carga de casi 2 horas debido a la acumulación de coches y a la limitada potencia disponible.
El despliegue de infraestructura de carga es uno de los cuellos de botella que afecta al crecimiento de la movilidad eléctrica. Aunque la red de carga de acceso público ha aumentado en los últimos años, con 29,301 puntos en 2023, sigue siendo un desafío satisfacer la demanda creciente de coches eléctricos.